- Año: 2011
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Fotografías:Satoshi Asakawa
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Las bibliotecas en Japón están apuntando actualmente a ser espacios que animen a los lectores a permanecer en ellos, en lugar de solo almacenar libros para el préstamo. Como reflejo de esta tendencia, esta biblioteca usa estantes compactos automáticos, que funcionan como un sistema de estanterías cerradas.
Esto se combina con salones y salas de reuniones que promueven el intercambio social entre sus usuarios, como un centro comunitario. El edificio también apunta a servir como un nuevo centro social para la comunidad local.
Para una biblioteca pública de este tipo, se pensó que lo más importante debía ser una sala de lectura que ofreciera a los visitantes un espacio agradable y cómodo para leer. La idea era generar un entorno para experimentar el placer de la lectura, rodeado por una presencia física abrumadora de libros.
Se propuso entonces un espacio de 45 x 45 m, con una altura 12 metros, rodeado por un muro perforado y apoyado en 25 pilares. Esta operación logra generar una atmósfera especial para la lectura, en una sola "habitación" de luz suave y bastante abierta hacia el exterior. Esta forma simple de "caja", entrega una cierta libertad que permitirá en un futuro recibir nuevas formas de comunicación digital de la información.
El muro perforado se compone de casi 6.000 orificios de 200, 250 y 300 mm, que permiten generar la luz uniforme buscada para la lectura. Además, las cargas de la fuerza de un sismo se distribuyen por todo el muro de forma pareja.
Un sistema de calefacción por losa radiante que calienta y enfría el edificio fue instalado con el fin de hacer más cómodo este amplio espacio, mientras que las grandes aberturas de ventilación natural en el techo aseguran un ambiente fresco durante los meses más cálidos.